El Arma
El arma es la herramienta/tecnología que permite proyectar la fuerza que necesaria para defender al individuo o grupo de las amenazas que lo perjudican.
El arma es la herramienta/tecnología que permite proyectar la fuerza que necesaria para defender al individuo o grupo de las amenazas que lo perjudican.
Detrás de cada conflicto hay personas, y otras, que se encargan de mediar en la resolución de los mismos usando la formación y fuerza necesarias.
A veces la coyuntura hace necesaria una intervención armada para su resolucion. Esas circunstancias y su desenlace siempre requieren análisis.
Reconozco que tengo algo abandonado – aunque para nada olvidado – mi blog militar. Me “costó” demasiado esfuerzo y horas de trabajo ponerlo en marcha y ajustarlo a los niveles de calidad que exijo a casi todo lo que hago, como para ahora darlo ahora por perdido. Es uno de mis proyectos personales y aunque puede que parezca aparcado o criando polvo en el disco duro de mi servidor Web, se mantiene en la recamara de una arma perfectamente bruñida, lubricada y dispuesta a disparar sus contenidos. Tengan a buen seguro no abandono aquello que creo y en lo que creo. Eso sí, con tranquilidad y a mi ritmo por supuesto, por encima de cualquier otra consideración.
Bueno señores… a lo que iba. Cada vez que participo como espectador en una exhibición aeronáutica, tengo la costumbre de llevarme algunos folletos que la organización distribuye entre los asistentes. Atesoro muchos de ellos con la idea de irlos publicando poco a poco. En esta ocasión les traigo algo del pasado y algo del presente:
Les enumero los ficheros que encontraran en su correspondiente sección del área de descargas:
Antes he escrito “costar” entre comillas porque, aunque ciertamente tanto a nivel técnico como creativo mantener esta web es tarea compleja, coincidirán conmigo en que cuando uno hace algo que le gusta el tiempo pasa de otra manera y el esfuerzo se disfruta con otra intensidad. ¿No creen? De hecho, mientras escribo estas líneas me estoy preguntando a mí mismo:
¿Cómo no dedico más tiempo a esto y alimento mi blog con más frecuencia? ¡Con lo que me gusta!
En fin… les dejo pues con esos documentos – difícilmente los encontraran fuera de esta excepcional web – que he escaneado para ustedes esperando que os sean de interés y/o útiles. Pueden usarlos con toda libertad, aunque lo deseable sería que me citasen como fuente de los mismos.
Un saludo, Damas y/o Caballeros.
P.d.: No solo folletos… también cientos de fotografías… pero eso da para otra historia.
🙂
Con absoluta seguridad una de las cosas que me ponen los “ojos como platos” son las visitas a instalaciones aeronáuticas. Bueno… quizá la mirada limpia y clara de los ojos de una mujer que no oculte sus pensamientos… Pero, eso, es otro tema.
Hace unos días, armado, como único testigo afortunado, con la cámara de un viejo teléfono móvil, visité a las instalaciones del Museo de Aeronáutica y Astronáutica de Cuatro Vientos en Madrid. – Craso error el mío. Victima de las prisas por escapar del calor y el estrés del trabajo en Sevilla, dejé la cámara sobre mesa del recibidor para acordarme de echarla en la mochila y… allí se quedó.
España, ha sido históricamente un país cainita como pocos. Permanentemente sumido en la disputa, el norte frente al sur, la derecha frente a la izquierda, la Constitución frente a la República, el pasado frente al futuro, el empresario frente al obrero, ello nos ha conducido a agrios debates, entre los que hemos perdido y diluido la importancia del momento y de conservar sus testimonios simplemente por amor al reflejo fiel de la historia.
Pude sacar cuatro fotos afortunadas que son las que traigo para compartir con ustedes (reseñas clickando sobre cada imágen), pero no dejo de preguntarme que hubiese sido de nuestro museo, si en vez de pelearnos entre nosotros y sumirnos en disputas por los motivos más peregrinos, hubiésemos tenido visión histórica y sido capaces de conservar e incentivar adecuadamente el increíble patrimonio aeronáutico del que nuestro glorioso país puede presumir a pesar de que nos dé la vergüenza que en en algunos casos nos da hacerlo. – !Jodida política y políticos! – Desde mi punto de vista más allá de armas veo la ambición humana, las máquinas más avanzadas de su época, nuestros grandes pilotos y el excelente uso del material del que dispusieron, nuestros inventores, nuestros grandes raids y hazañas aeronáuticas, nuestras victorias – y derrotas – militares, nuestras colaboraciones internacionales, nuestro futuro aeroespacial… Ufff, demasiada historia para resumirla en un post “legible y de extensión contenida”, demasiadas “máquinas” para tan reducido recinto.
Viajen amigos, viajen y vean lo que otros países son capaces de hacer con patrimonios aeronáuticos en algunos casos inferiores al nuestro. Visitas, promociones, cultura, semilleros de crecimiento económico, industrial y humano. Ah, sin olvidar el prestigio social y político para las localizaciones que lo acogen, tengámoslo en cuenta.
Como le dije a mi amigo Pepe, viejo paracaidista y colaborador oficial del Museo del Aire de Cuatro Vientos, no sabemos apreciar el tesoro que tenemos. Es apabullante la cantidad de historia que tenemos encerrada en ese pequeño recinto. Le dije que además del increíble trabajo de recreación histórica realizado en el Hangar “I”, eché en falta en sus instalaciones una biblioteca/videoteca en el que investigadores como yo podamos nutrir nuestras ansias de conocimiento y documentación, con las cuales saciar nuestra curiosidad y afán de divulgación. Dicho queda ahí y tiempo al tiempo.
Pero tirando para mi tierra, Andalucía. Qué me dicen de Sevilla, de Construcciones Aeronáuticas, de los Saeta, de los Buchones, de los Pedros, de la Triana de la Hispano Aviación, de la B.A. de Morón de la Frontera, de las imprescindibles factorías de Airbus en San Pablo y Cádiz. España, Andalucía y Sevilla en particular se merecen un museo a la altura de su pasado, de su presente y de su futuro – Podría escribir páginas y más páginas acerca de ello, pero tiempo habrá – Tuvimos para ello un germen en exposición que se celebró en 2010 en las instalaciones Pabellón del Futuro de la Isla de la Cartuja de Sevilla y ahora en la pequeña zona expositiva de la Base Aérea de Tablada (aunque sería interesante considerar los pabellones de la Navegación y aledaños de cara al futuro). Se trata de una industria que genera un capital intelectual y económico sin parangón. Siempre he luchado por ello y siempre lo haré.
Del pasado, de la historia, se aprende y, si sabemos conservarla, tendremos un elemento en el que basarnos para construir un futuro sólido y próspero.
Un saludo y hasta la próxima, Damas y Caballeros.
P.d.: Futuro – si – una palabra que he mencionado mucho… considérenla. Nos vemos ahí arriba!!!
😎